"Posiblemente este hombre es absurdo. Sin embargo es menos absurdo que el rey, que el vanidoso, que el hombre de negocios y que el bebedor. Al menos, su trabajo tiene un sentido. Cuando enciende su farol, es como si hiciera nacer una estrella más, o una flor. Cuando apaga su farol, se duermen la flor o la estrella. Es una ocupación muy linda. Es verdaderamente útil porque es linda."
Antoine de Saint-Exupéry


miércoles, 8 de diciembre de 2010

En la cárcel y con miedo

Una está con el mono naranja en el corredor de la muerte y aguanta. Y aún así anda con el temor en el cuerpo cuando sabe que lo único que le puede pasar ya lo tiene firmado.

En la cárcel y con miedo dice mi amiga Tere y así andamos pues manda carajo que sabiendo lo que te espera aún vivas con el susto en el cuerpo.

Intento por todos los medios no caer en las trampas de mis carceleros pero vuelvo a incidir una y otra vez para regocijo de unos cuantos. Eso sí, caigo y me vuelvo a levantar mientras reviso mi caricatura en el cartel pegado en mi celda con letras negras enormes de “se busca”.

Sinceramente, he salido favorecida y aún espero que suban mas la recompensa por mis servicios que lo valen. Hay demasiadas pistolas apuntando mi sien mientras camino erguida, hay ansia de tener mi cabeza dentro de un tarro encima de una vitrina a la vista de muchos que lo esperan mientras brindan por mi salud.

Existen varias personas que me ayudan con una sonrisa mientras aguardan con la soga escondida a su espalda. Lástima que continúen buscando una viga donde colgarme porque aún no saben que en mi faro el techo que me cobija sigue siendo estrellas y cielo. Imposible encontrar un puntal donde suspender mis ganas de seguir.

Hay otras que adornan su amparo con palabras bonitas y promesas de libertad que ni siquiera ellos tienen pero me regalan en paquetes envueltos en diversos venenos a los que soy inmune por el momento. No dejéis de probar, seguiré inventando antídoto para todos ellos.

Las hay que disparan al aire pensando que alguna bala perdida me llegará directa en mensajes sublimes que lo único que consiguen es arrancarme una lágrima no furtiva pensando en lo que han debido trabajar para ello y la lástima que me producen.

Los más se amparan en el silencio que les lleva al olvido y se entierran bajo compromisos nunca cumplidos.

Los menos son los que me visitan y alaban lo bien que me queda el mono naranja, los que me traen regalos en forma de sonrisas, de pactos firmados con cervezas a escondidas. Son los que me pintan los barrotes con caracolas de la playa donde habito, los que convierten los sueños en realidades. Los que pasan contrabando con lo que necesito bajo las reja.

Aquellos que firman mi recurso para salir de aquí sabiendo como yo que ese momento llegará pronto y se acabará el miedo.

En la cárcel y con miedo dejará de ser algo que vivo para convertirse en una frase hecha. Y será por sentencia sin duda.

4 comentarios:

  1. Hola guardiana:
    No sabes como entiendo esa frase, en la cárcel y con miedo, así me siento yo ahora mismo, por no poder gritar lo que siento, por tener que agachar la cabeza y ser sumisa, cuando eso nunca ha ido conmigo, por guardarme las ganas de hacer una llamada por no molestar, pero bueno al final oigo esa vocesita en mi interior que me dice...."de que te quejas si sabias lo que había", pero como tu dices muy bien, aun no han encontrado un puntal donde colgar mis ganas de seguir... podrán matar mi ilusión, pero no mis ganas.
    Perdona si me enrollo demasiado...
    Por cierto soy chica, ya que la ultimas vez no lo tenias muy claro.

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  2. Anónimo no me ayuda mucho, en cualquier caso bienvenida a mi Faro.Por cierto, no agaches la cabeza, haz la llamada si lo necesitas y si te dicen no, no vuelvas a llamar.No seas sumisa, sé tu, que te puedo asegurar que con ese papel ya es mucho en esto de la vida.

    Escribe aquí lo que necesites, que la censura se la llevó una tormenta en una de esas noches que renegué de la tierra y me quedé a orillas del mar.

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  3. Hola guardiana,
    Aterrada me dejó tu texto, tu carta, tu diario, tu blog... no sé cómo definirlo. cualquier cosa que se diga ante ello dará la sensación de vacío, de falso, de bonitas palabras fáciles de decir por alguien que ni siquiera te conoce, sólo te lee y lo único que puede hacer es acompañarte, en este caso, en tu celda.No sé que es eso que te mantiene vestida de naranja y con miedo, y sólo se me ocurre decirte que si en mi mano estuviera, ayudaría a romper esos barrotes y te prestaría una camisa y unos pantalones de color blanco.
    Besos y mucho ánimo.

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  4. El mono naranja se puede volver en un minuto en blanco u otro color. Confío en que será pronto, mientras tanto, recibo visitas agradables. Gracias

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