"Posiblemente este hombre es absurdo. Sin embargo es menos absurdo que el rey, que el vanidoso, que el hombre de negocios y que el bebedor. Al menos, su trabajo tiene un sentido. Cuando enciende su farol, es como si hiciera nacer una estrella más, o una flor. Cuando apaga su farol, se duermen la flor o la estrella. Es una ocupación muy linda. Es verdaderamente útil porque es linda."
Antoine de Saint-Exupéry


domingo, 26 de julio de 2009

Me debes un sueño


O te debo yo muchos, me lo aclaras tú ?

No sé lo que sueñas despierta, pero ansío saberlo uno de estos días.

Yo no sé que darte, porque de esos (los sueños) estoy bastante llena, pero me falta averiguar a ciencia cierta ,de qué manera, de qué forma, son los tuyos para que se amolden a los míos.

Imagino, pienso, pero parece que por el momento nada se acerca a lo que deseas aunque sospecho que pronto los tuyos y los míos se encontrarán.

Mientras te miro pienso en miles de sueños y tengo miedo a que nada se parezca a eso que anhelas, y entre mirada y mirada, me invento uno nuevo que se queda en mí porque no sé cómo decirte que en el sueño que quizás te debo, estás tú.

Te correspondo un sueño y cada noche, al acostarme pienso en cuál regalarte a lo largo del siguiente día. Intento mil y una tretas para satisfacer tus sueños, y a veces pienso que no soy capaz de llegar siquiera allí dónde comienzas a soñar. Quieres enseñarme tú?

Mientras pienso en cuál regalarte me paseo de puntillas por los distintos colores para pintar el exacto, con el matiz preciso, con el tono justo para que tus ojos se queden prendados de un sueño que deseas.

También suelo examinar mis pensamientos por si en alguno de los recovecos se me quedó algo que aún no te dije. Dios!!! Cuántas cosas por expresar aún sin saber como liberar las palabras que presas están.

Ensayo en las noches miles de suspiros, miles de palabras e imágenes para regalarte, pero cada amanecer se quedan en mi pecho porque me cuesta llegar a ti, encontrar el camino y no quiero buscar ningún atajo. Reconozco que el miedo atenaza aún mis deseos.

Te debo cientos de sueños que aún están por cumplir, que quiero que se hagan realidad a mi lado, todos esos que tú también, estoy segura, sueñas y que compartiremos.

Lo mejor de todo, es que hoy no nos obligamos a darnos ningún sueño pero deliramos con ellos.

Hoy voy a forjar el mío partiendo de una caricia, una mirada y un suspiro. La mejor base cuándo sé que esa mirada era exclusivamente para mí, cuando la caricia aún me quema y el suspiro resuena en cada rincón de mi mente.


Quizás no te deba un sueño, pero sí la capacidad de poder seguir soñando.

Me sigo preguntando qué sueñas tú.

2 comentarios:

  1. Es precioso, es muy bonito.

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  2. Gracias, he intentado entrar en tu perfil pero no me deja. Gracias de nuevo por pasarte por mi Faro

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